Actualización Descartes.
La revolución científica del siglo XVII y el agotamiento de las propuestas escolásticas llevó a la filosofía a situar en el centro de sus preocupaciones el problema del conocimiento: ¿Existe el conocimiento verdadero? Las dos grandes escuelas de este siglo se enfrentan a la misma problemática, pero se diferencian en la manera de afrontarla.
Por un lado, el Racionalismo, cuyo fundador fue Descartes, se caracteriza por conceder la primacía a la razón para alcanzar la verdad y sostiene como principio básico que nuestros conocimientos verdaderos de la realidad tienen su origen y fundamento en la razón. Identifican el conocimiento racional con el conocimiento científico y especialmente con las matemáticas, que toman como modelo deductivo del saber. El problema que se les planteará será como aplicar el método matemático a la filosofía.
En contraposición, los empiristas defienden que nuestro conocimiento procede en última instancia de los sentidos: el origen y el fundamento de nuestro conocimiento verdadero se encuentra en la experiencia sensible. Establece un límite en las posibilidades del conocimiento, que no puede ir más allá de la percepción sensible. Los empiristas toman el modelo experimental de la fisica y rechazan radicalmente la existencia de las ideas innatas de tipo platónico.
Por tanto podemos decir que empiristas y racionalistas abordan con métodos opuestos el problema del conocimiento: los primeros fundamentándolos en la experiencia sensible y los segundos tomando la razón como principio básico y defendiendo el innatismo como punto de arranque del proceso deductivo para alcanzar el verdadero conocimiento.
Victor Villaescusa y Albert Antolí